miércoles, 26 de septiembre de 2012

Vendimia bajo las estrellas


Pocas imágenes más impactantes que las que ofrece un viñedo bien cuidado a la luz de las estrellas, con los exuberantes racimos de uvas “garría” bajo ese claro-oscuro manto que ofrece la noche en el Aljarafe sevillano.
Y es que hay veces que hay que salirse de lo tradicional, como lo es la vendimia durante el día, si la naturaleza y los avances técnicos así lo aconsejan, pues la zona Sur de España con unas temperaturas medias durante la vendimia de 35º, no son las condiciones optimas para una vendimia.

                                                              
Carlos Falcó fue el primero en instaurar esta práctica en su toledano Dominio de Valdepusa, creando todo un espectáculo mediático. Cortar racimos de uva en la oscuridad, alumbrado con linternas, focos, antorcha e incluso cascos mineros, causa una impresión imborrable para cualquier aficionado a estas tareas.
Las razones técnicas para la recolección por la noche, evitarían disparar la actividad enzimática y crear fermentaciones espontáneas indeseadas, como ocurre bajo las altas temperaturas diurnas del verano andaluz, por no hablar de las dificultades enológicas que tan altas temperaturas plantean a los enólogos.

                                                           
No es de extrañar por tanto, que cada vez haya más bodegas que con máquinas o a mano, hagan de la vendimia nocturna un trabajo que al aficionado le parece romántico, incluso diría yo que casi entraría en el misterio, hasta en la brujería o en la alquimia, al constatar de cómo un mosto  siendo un producto natural, evoluciona hacia magníficos caldos, en función del tipo de uva y del mimo con que la traten los lagareros y bodegueros.

                                                         
Por nombrar algunas bodegas que ya hacen la vendimia por la noche y aparte de la ya nombrada, estarían:
Pagos de Leza (Álava), Bodegas Valduero, en Gumiel del Mercado (Burgos), Pago de las Encomiendas en Villafranca de los Barros (Badajoz), Lynus Viñedos y Bodegas, en Quintanilla de Onésimo (Valladolid), Diez Siglos de Verdejo en Serrada (Valladolid), y en Andalucía solo tengo noticias de las Bodegas Marqués Casa-Pardiñas, en Huélago junto a Guadix (Granada).
Algunas de estas bodegas, incluso han hecho un espectáculo para los interesados, que aparte de contemplar la recolección y la pisa, terminan tomando chocolate con picatostes, todo desde luego pagando, claro.

                                                            
Yo le aconsejaría a mi amigo el Coco, que como saben ya ha hecho la vendimia y la pisa de este año, organizara grupos de curiosos para que vieran como los vendimiadores con cascos de mineros la llevaban a cabo en sus viñas, como se pisaba y almacenada en los toneles, y acabaría dando un chocolate con migas y uvas, que yo  haría con mucho gusto, y por supuesto cobrando el espectáculo y el desayuno, aunque terminaría con una degustación de una copita de “mistela” de la cosecha del pasado año. Dicho queda y que conste que no cobro por la idea.
Nuevas formas y nuevas maneras para que lo que nos da la naturaleza, llegue a nuestras casas de la forma más ecológica y natural posible.

                                                              

martes, 18 de septiembre de 2012

EL MOTE



Todo el pueblo se preparaba para la Feria de Septiembre, que como cada año coincidía con la vendimia, donde muchas bodegas y particulares, pisaban la uva que sobre finales de Noviembre o principios de Diciembre ya sería vino joven, aunque aquí lo llamaban “mosto”, siendo muy demandado y apreciado en toda la provincia.
Juanito, como le llamaban, tenía su caseta en la feria, que se montaba entre un gran número de amigos y que era de las más  divertidas y concurridas del recinto.
                                                                
                                                               
Una de las noches, conoció a una morena que no había visto nunca por el pueblo, ya que había venido a casa de sus abuelos a divertirse durante estos días. Se enrolló bastante bien con ella, de tal forma, que al acabar la feria ya iban cogidos de la mano y se besuqueaban en cualquier rincón que estuviese oscurito.
Quedaron al fin de semana siguiente para salir y tomarse unas copas, por ver si lo suyo iba adelante o se quedaba en un proyecto inacabado que floreció con la alegría del baile y el vino.
Estuvieron charlando toda la tarde y parte de la noche, y cuando ya el alcohol empezó a hacer los primeros estragos, entre besos y arrumacos se metieron en el coche para buscar un lugar discreto donde dar suelta a las pasiones que se revelaban como mutuas.

                                                            
A las afueras del pueblo donde acababa el cementerio, vio Juan una finca donde la valla o no existía, o se había caído, y paró el coche frente a un solitario y enorme tractor allí aparcado.
Inmediatamente y a oscuras los cuerpos se buscaron ávidamente, pues ya el deseo mutuo era imparable, y la tranquilidad del sitio y lo silenciosa de la noche invitaban al desenfreno.
Estando casi desnudos y en plena faena, aquello se iluminó como si fuese una fiesta, y es que el enorme tractor que estaba preparado para iniciar la vendimia esa noche, encendió todas sus luces ante la sorpresa de los dos tortolitos.
                                  
                                                              
Juan pudo arrancar el coche y dar marcha atrás para salir al camino, pero con tan mala suerte que las ruedas traseras se metieron en una zanja lateral para el riego, que no había visto.
Ella salió del coche vistiéndose de espaldas a las luces, echando a correr en cuanto tuvo puestos los zapatos sin mirar ni una vez hacia atrás. Lo del Juanillo fue peor, pues se tuvo que vestir fuera del coche al tener que salir por la ventana. Lo hizo con tranquilidad, incluso le dio tiempo a quitarse el preservativo que no se sabe si había usado o no, que aún llevaba puesto, y una cepa completa, incluido un racimo de uvas que se le había enredado entre las piernas al bajarse del coche.

                                                              
Ya más tranquilo se dirigió hacia el tractor con el corte correspondiente, de donde salieron riéndose dos lagareros que entre disculpas y risas ayudaron a sacar el coche de donde estaba metido.
Todos quedaron como amigos y prometieron no contar nada de lo que había pasado. Pero ya se sabe lo que son los pueblos, y a la mañana siguiente cuando fue a desayunar al bar donde siempre lo hacía, las medias sonrisas del dueño y los parroquianos, dejaron a Juan  bien claro que lo suyo lo sabía todo el mundo, incluso cuando se iba escuchó al dueño decirle: “Juanillo, esta noche ¿Vas a vendimiar?”

                                                                
De la chica nadie volvió a saber nada, pues jamás volvió a casa de sus abuelos, así que toda la guasa quedó para el “Juanillo”, que en el pueblo los amigos le pusieron de mote el “follauvas”.
Ni que decir tiene que a Juan le cambió la vida, pues  hacía poquísima vida en el pueblo aunque siguió viviendo en él, casándose y teniendo hijos y nietos, pero aún hoy cuando ya está jubilado y me contó esta historia, le siguen llamando a sus espaldas el “follauvas”, y se sigue contando la historia de aquel accidentado lance de juventud.

martes, 11 de septiembre de 2012

Vendimia en Villanueva del Ariscal, Taberna "El Coco"

Este año, la Fiesta de la Vendimia en Villanueva del Ariscal, ha tenido un carácter especial, ya que mis amigos Manolo Limón y Paco Limón, han sido Capataz Mayor y Pregonero respectivamente de esta LIX edición de la fiesta.

                                                                     El pregonero
                                                                                 

Entrega del catavino a Manuel Limón

                                                  La satisfacción del Capataz Mayor

El pregón tubo la finura y el detalle de un artista consumado de la gubia, con la que sacó toda la sensibilidad y la erudición sobre los temas de la vendimia.  Destacar la exposición de las raíces de una familia comprometida íntegramente con esta actividad del vino. La figura de su padre, Ángel, sobrevoló sobre todos nosotros con su recuerdo del "mejor lagarero de Villanueva".

                                         Paco y Manolo con su madre junto al lagar

Tuvo sabias palabras para todo el mundo de la producción y la crianza de mostos y vinos, y nombró a casi todas las personas  que fueron grandes  bodegueros o humildes trabajadores, y a una ingente cantidad de mujeres relacionadas con esta labor,  casi olvidadas en los anales del mundo de la vid.

                                          En plena labor el socio Manuel "El del Leo"

En este acto fue nombrado mi amigo Manolo, hermano de Paco, Capataz Mayor para esta edición de la Feria y Fiesta de la Vendimia, y como tal presidió la procesión de San Gines y la bendición y pisa de los primeros frutos de la vid. Fue el encargado junto con Pepe el "Chochero" de pesar el mosto, para proclamar su graduación, que en este año seco y caluroso, dio 12,5º.

                                                      La matriarca de la familia, Amparo. 

Pero en los siguientes días de la fiesta, la familia Limón-Parra hizo su propia vendimia en la Taberna "El Coco", siendo esta un poco mas corta que el año pasado, ya que se han llenado nueve barriles de 600 litros, con lo que la producción total se estima en unos 5.400 litros.
Loly la guapísima mujer del "Coco", nos deleitó a los curiosos con un exquisito potaje de garbanzos.

                                                                       ¡Guapa!

Es una realidad como está renaciendo en el pueblo la pisa de los propios caldos, ya sea antiguas tabernas, grupos de amigos o familias como la del "Coco".
Esperemos que este mosto salga como mínimo igual de bueno que el del año pasado.
Enhorabuena a todos y suerte.

                                                    Buenos lagareros y buena uva      


martes, 4 de septiembre de 2012

Miserias personales


Hoy voy a destrozar mi ego ante ustedes vaciándome de todo lo que tengo dentro, tanto anímico como físico; voy a faltarme al respeto desahogándome en mi blog que para eso es mío.
Este final de verano se me han reproducido todas las goteras convirtiéndose en un caño de penalidades físicas, que veremos a ver como acaba si es que acaba.

                                                                 
Yo ya tenía un problema neurológico con un nervio que me recorre la pierna izquierda de norte a sur, pero que se me ha complicado con un problema físico en la cadera del mismo lado , que al decir de mi ángel médico de la guarda, mi querida “nuera adjunta” Viky, la tengo hecha una puta mierda. O sea que me tengo que operar para que pongan una prótesis en mi desdichada cadera, pero mientras tanto estoy en un grito debido a los dolores que tengo y que en poco me alivia la cantidad de pastillas con que estoy destrozando mi sufrido estómago.

                                                               
Bueno, pues imaginar que aparte de esto, tengo la dichosa y fea costumbre de leer casi todos los periódicos, con lo cual y debido a tantas noticias negativas, acojonantes y tristes, el ánimo no me lo levanto ni mirando fotos de hace veinte años cuando me reía de la vida a la que me enfrentaba con una fuerza y una intrepidez de la que ahora carezco.
En esta situación me encontraba cuando me llamó mi amigo-hermano Pedro, para reconfortarse conmigo contándome el negro pesimismo que le embargaba por la caída de perspectivas de trabajo en su empresa, de la que es copropietario y gerente, y que con cuarenta trabajadores en plantilla, ya había reinvertido sus ahorros de toda la vida para no echar el cierre.

                                                   El Sr. de los Eurillos 

Pero como el humor no nos falta, me contó que de la cabecera de su cama había apeado a todos los santos, vírgenes y cristos, sustituyéndolos por fotos de la Merkel, del director del BCE Mario Draghi y de varias reliquias del FMI, del Parlamento Europeo y hasta del director del Banco Central Alemán.
Yo me permití aconsejarle que pusieras algunas velas bajo tanto capitoste, y que aprendiera algunas jaculatorias para hacer más fuerza, ya que nuestros todopoderosos y sobrados gobernantes, estaban más perdidos que Ulises en su barco buscando Ítaca.
En todo esto estaba cuando acerté a leer en el contexto de una novela histórica, una sentencia de un desconocido filósofo diletante que decía:
El ser humano busca el bienestar  y la felicidad por instinto, pues el sufrimiento le da qué pensar. Es como si la capacidad de razonar fuera demasiado pesada.”
Y que más os puedo decir, porque me gustaría tener soluciones para aliviarme esta pesada losa que tengo por sombrero. Sólo me da ánimos, cuando al mirar para detrás, ves que hay mucha gente peor que tú de jodidas. Consuelo de necios, aunque algo es algo.

                                                                     
Me acuerdo de una vez hace tiempo, cuando trabajaba de director de zona en una empresa de suministros hospitalarios, y que estando en una reunión donde nos daban los objetivos de venta para el año siguiente, ante la enorme e injusta carga que nos habían dado a mis delegados y a mí, le dije al director: “Ramón, dame un beso.”
Este se quedó cortado mirándome sin saber que decir y yo le dije: “Es que cuando me joden, me gusta que me besen.”

Desde mi sillón de orejas, a 4 de septiembre del 2012.